PRÓXIMA COMIDA

De momento, sin previsión :·(

Por favor, animaros y me decís quién y cuándo organiza la próxima comida.














31 de Octubre de 2010
Malagueña y exquisita

Este mes hemos disfrutado de una comida "malagueña y exquisita", como la cerveza Victoria. Y es que nos han sorprendido con una comida típica malagueña. El menú se ha mantenido en secreto hasta última hora por lo que llegué a temer tener que comer con los ojos vendados, como en las gymkanas.
Lo cierto es que ha merecido la pena la espera y daba gusto ver a la gente mojando sopas en la salsa de la carne.
El menú era el siguiente:

El ajoblanco era de los dos tipos, de almendras con harina de habas y de habas secas cocidas y machacadas. Además, había pasas e higos secos para acompañar.
Creo que ha sido todo un éxito viendo cómo se vaciaban las fuentes y decaían las conversaciones por momentos cuando llegaba un plato nuevo.
Los cocineros eran Juan y Mari Ángeles (estrenándose) y Javi y Ana (repitiendo) y nos juntamos en la cochera de los primeros. Afortunadamente el local era cojonudo, amplio y a prueba de lluvia, porque soportamos una manta de agua considerable y los zagales tuvieron que estar dentro. Los pobres se entretuvieron jugando a la pelota, a las carreras de sillas y a todo lo que nos podamos imaginar. Y los mayores, comiendo castañas y jugando al bingo en "portuguéis" que es mucho más divertido que en Español. "O vintetréis, dous, treis". Yo no sé cómo aguantaban sin reírse y tirar todas las fichitas de cartón con las que se tachaban los números. Una de las veces ganó Mercedes, demostrando que los niños vienen con un pan debajo del brazo. De la otra partida no me enteré porque yo andaba pululando por ahí con mi cubata, de la seca a la Meca entre la cochera, la cocina y el patio. Por cierto, hay que ver qué éxito de público tuvo el patio. Parecía la puerta de las urgencias de maternidad con todo el mundo fumando a todo trapo. Hasta los ratos de lluvia aguntaban algunos. Yo creo que Juan y Mari Ángeles deberían haber hecho 100 metros de patio y el resto de casa.
Por mi experiencia de la vez anterior sé que Juan y Mari Ángeles no se pueden quejar de compañeros. Encima, nuestra consigna secreta ellos la tenían mucho más fácil de ejecutar. A mí me dijo Eva que para que nos saliera todo bien era muy importante que yo no tocara nada de la comida. Podía traer y llevar cosas, fregar cacharros, pelar verduras, incluso batir... pero nada más. Así que esta vez lo han tenido facilísimo y a la vista está que la comida salió tremenda:
Eran productos y platos tradicionales, que por ser habituales nos pueden parecer "normales" pero cuando te paras a saborearlos y disfrutar de ellos te das cuenta de que son un lujo. Hace tiempo oí en la tele la noticia de que Josua Bell, uno de los mejores violinistas del mundo se puso a tocar en el metro de Washington. Estuvo tocando durante casi una hora y apenas 7 personas se pararon más de un minuto. El único que mostró verdadero interés fue un niño de tres años al que su madre se tuvo que llevar arrastrando. A pesar de que unos días antes había colgado el cartel de "no hay entradas" en el Boston Symphony Hall (a 100 euros la entrada) sólo 27 personas le echaron algo y sólo consiguió 32 dólares. Una cosa así nos pasa a veces en la vida y no apreciamos nuestra casa, las personas que nos rodean, los manjares que comemos...
Yendo a lo que interesa, el salcichón y el queso estaban divinos, la ensaladilla malagueña, de muerte y el ajoblanco fabuloso. En mi casa, normalmente se hace más fuerte, añadiendo ajo y vinagre hasta el límite que puede soportar el ser humano. Además de desinfectar a conciencia, repele a las moscas por lo que todo son ventajas. La única pega es que se te pueden saltar las lágrimas si no estás acostumbrado. Creo que para un grupo numeroso fue un acierto hacerlo más suave.
Y, por último, el plato fuerte: la carne que estaba de toma pan y moja, literalmente. Gracias a la hoja con el menú nos pudimos ir dosificando para llegar "con fuerzas" a las super-gachas. Todos decían: "no puedo más", "es mucha comida", pero a la hora de las gachas, cuando preguntaron si queríamos todos dijeron: "Bueno, un platillo para probarlas" Y algunos repitieron con "otro platillo". Sería para confirmar la primera impresión de la prueba inicial.

Bueno, la cosa parece que marcha bien. Buscando local y estatutos, logotipo, mascota...


Creo que lo siguiente sería sacar miss y míster bogavante (que serían los dos que coman más, no los más guapos). En fin, a ver si de aquí al mes que viene nos ha dado tiempo de mover algo. Por lo menos lo del míster lo tenemos fácil, ¿no Elías?
Respecto a la votación del logotipo, a pesar del apoyo mayoritario de los niños me temo que es delicado coger el dibujo de Sebastián, el cangrejo de La Sirenita, por aquello de los derechos de autor. Lo podemos hacer mascota honorífica y comprar vasos y manteles decorados pero no lo pienso poner donde me pueda costar un empapelamiento. Así que quedaría primero el dibujo que trajo Juani. El que buscó Javi también es chulo y probablemente quedaría mejor en los delantales porque son colores planos, más fáciles de serigrafiar.
Terminamos el día con el sorteo de los próximos cocineros y ahí sí que tengo que protestar, porque me tocó. Así que mientras escribo esto tengo por detrás a mi Evita preguntándome: "Juanjo ,¿qué guisamos? ¿unas migas o comida asturiana? ¿O mejor mexicana? Voy a llamar a Mercedes a ver qué opina..."
Yo lo tengo claro. Lo primero es sacar a la niña de la bañera, que se está poniendo "cocha" y luego ya veremos.
Con todo, es una decisión difícil porque uno va cambiando de idea según los días. Encima, las espectativas van subiendo a medida que nos superamos con cada comida. Antes de empezar con el Bogavante, si conseguíamos organizarnos para encargar un arroz de El Cortijuelo para la Fiesta ya era un logro. Y ahora nos estamos juntando cada mes para chuparnos los dedos. Para mí eso es precisamente lo más impotante: Juntarnos (no chuparnos). Así nos vemos, hablamos y mantenemos el contacto. Y si ademas cuando nos juntamos es para una fiesta, pues mejor que para un entierro o una boda (*). Recapitulando sobre este tiempo, hay que dar las gracias a todos los organizadores por habérselo currado en cada cita, porque las comidas han sido "una buena y otra mejor". A ver el mes que viene cómo lo echamos. Mientras tanto voy a ir llamando a nuestros medianeros porque ya va siendo tiempo de revisar el menú.
Mientras tanto os dejo entretenidos con las fotos.

31-10-2010 COMIDA MALAGUEÑA


(*)Espero que os acordéis de esto cuando os digamos que hemos preparado "una cata" de pollos asados encargados en una selección de las mejores pollerías del pueblo. Y de beber tinto de verano que hay que gastarlo. Que si seguimos trayendo vinos buenos vamos a tener que usar los tintos de verano para regar el huerto.